"El Huevo de Colón" es el nombre por el que los sevillanos conocemos a la escultura "Nacimiento de un Hombre Nuevo", situada en el barrio de San Jerónimo, al norte de la ciudad y fue un regalo de Rusia a Sevilla con motivo de la Exposición Universal de 1992.
En las próximas líneas hablaremos del origen de la expresión "huevo de Colón"; de la escultura de Tsereteli; de sus dimensiones; de sus "hermanas" repartidas por el mundo desde París a Puerto Rico... Pero además, ¿Sabías que la Exposición Universal de 1992 iba a tener una doble sede? Sí, Sevilla iba a compartir Expo con una ciudad de Estados Unidos. Sigue leyendo y conocerás todas estas curiosidades.
La escultura del llamado "Huevo de Colón" fue un regalo del Ayuntamiento de Moscú al de Sevilla en el contexto de la conmemoración del V Centenario del Descubrimiento de América y la celebración en Sevilla de la Expo 92. Su autor es Zurab Tsereteli; pintor, escultor y arquitecto ruso de origen georgiano nacido en 1934. Fue presidente de la Academia de las Artes rusa y miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid.
¿Conoces el origen y significado de la expresión "el huevo de Colón"?
Según el Diccionario de la lengua española de la RAE, la expresión "huevo de Colón" significa "cosa que aparenta tener mucha dificultad pero resulta ser fácil al conocer su artificio".
El origen lo tenemos en el humanista Girolamo Benzoni y su Historia del Nuevo Mundo (Venecia 1565). En esta crónica podemos leer lo siguiente: "Estando Cristóbal Colón a la mesa con nobles españoles, uno de ellos le dijo: Señor Colón, incluso si vuestra merced no hubiera encontrado las Indias, no nos habría faltado una persona que hubiese emprendido una aventura similar a la suya, aquí, en España que es tierra pródiga en grandes hombres muy entendidos en cosmografía y literatura. Colón no respondió a estas palabras pero, habiendo solicitado que le trajeran un huevo, lo colocó sobre la mesa y dijo: Señores, apuesto con cualquiera de ustedes a que no serán capaces de poner este huevo de pie como yo lo haré, desnudo y sin ayuda ninguna. Todos lo intentaron sin éxito. Cuando el huevo volvió a Colón, este lo golpeó sutilmente contra la mesa aplastando la curvatura de su base, lo que permitió dejarlo de pie. Todos los presentes quedaron confundidos y entendieron lo que quería decirles: que después de hecha y vista la hazaña, cualquiera sabe cómo hacerla".
Nacimiento de Un Hombre Nuevo en Sevilla
Dentro del proyecto artístico de Tsereteli "Cómo Europa encontró América", dedicado al primer viaje de Colón, con motivo del V centenario, españoles y americanos decidieron levantar monumentos a ambas partes del océano, anunciándose un concurso cuyo propuesta ganadora sería la de Zurab Tsereteli. El proyecto pretendía unir simbólicamente el punto de partida y el final de aquel viaje, conectando Europa y América mediante dos grandes esculturas.
Algo que muchos desconocen es que la conmemoración del V centenario del Descubrimiento de América iba a tener su sede compartida a ambos lados del Océano Atlántico. Sevilla se presentó como candidata a organizar una exposición a nivel mundial para celebrar la efeméride pero había otra ciudad que quería ser candidata y esta fue Chicago. En 1982 se aprobó la organización con doble sede aunque finalmente Chicago acabó renunciando por diferentes problemas y Sevilla quedaría como única sede. Y es que muchos no sabrán que Chicago había celebrado un siglo antes la Exposición Mundial Colombina con motivo del IV centenario en 1893, queriendo por ello ser también partícipe de la celebración de los 500 años del acontecimiento.
Volviendo al tema principal de esta entrada, a la escultura de Zurab Tsereteli, el monumento llega a España en barco y desmontada por piezas debido a su enorme tamaño. En concreto llegó a Santurce y desde allí, emprendió el camino a Sevilla repartido entre siete camiones trailers y dos vehículos especiales para las piezas más grandes.
Aunque el regalo se hizo en 1992, no sería hasta 1995 cuando se monta e inaugura. El actual parque de San Jerónimo donde se encuentra la escultura, nació como vivero donde se cultivaban y aclimataban las plantas que decorarían el recinto de la Exposición Universal. Una vez clausurado el evento comenzó su conversión en parque público y se elegiría como ubicación para el grupo escultórico.
Sus casi 46 metros de altura la convierten en la escultura en bronce más alta de España y está formada principalmente por dos elementos principales. Por un lado tenemos el huevo, el cual se forma por las velas y las cuerdas de las tres carabelas y alberga en su interior una estatua de Cristóbal Colón de 32 metros de alto. El almirante sostiene entre sus manos un mapa desenrollado en el que aparecen de nuevo las tres naves utilizadas para el viaje.
Desde el inicio, la escultura ha sufrido el vandalismo y el expolio. Ya en el año 2000 una restauración consiguió reparar los daños y las piezas que faltaban pero los ataques han sido continuos. El pasado 2021 y ante la denuncia del Ayuntamiento de Sevilla, la policía abrió una investigación que se saldó con cuatro detenidos y más de 500 kg de bronce recuperados. El problema sigue ahí y el expolio continúa, algo que lleva a muchos voces a pedir el traslado de la escultura a otro emplazamiento donde no corra peligro su conservación.
Pero el "Huevo de Colón" sevillano no es el único. Zurab Tsereteli realizó un copia en pequeño formato, algo que hace pensar a muchos que quizás se trate del boceto original de la obra y que el artista donó a la UNESCO, en cuya sede parisina en Place de Fontenoy se encuentra. La escultura se realizó en 1992 pero Tsereteli la donó en 1994 cuando fue nombrado Embajador de Buena Voluntad.
En el año 2005, con motivo del 60 aniversario de la UNESCO, Rusia lanzó un sello conmemorativo con la imagen de esta escultura.
Más imágenes de "El Huevo de Colón" en Sevilla:
Como antes comentamos, el proyecto lo formaban dos esculturas, una marcaría el inicio de la expedición y otra el final. Ya hemos conocido la escultura sevillana, hagamos ahora lo mismo con la otra mitad del proyecto, la escultura americana.
Nacimiento de Un Nuevo Mundo en Puerto Rico
Como antes comentamos, Chicago celebró la conmemoración del IV centenario de la llegada de Colón a América y quiso participar en la organización del 500 aniversario. Por eso no debe extrañarnos que la escultura que se iba a instalar en el Nuevo Continente, fuera en una ciudad de los Estados Unidos. En 1990, el por entonces presidente George Bush, visitó el estudio de Tsereteli en Moscú, eligiendo un modelo de la escultura de entre los tres borradores que el artista le presentó. En 1994, el monumento ya terminado viajó a Estados Unidos, siendo su primer destino Florida. Al no convencer, se envió a Nueva York, de ahí a Ohio, a Maryland, y así inicia un periplo por el país recibiendo el rechazo generalizado de las diferentes instituciones.
En 1998, el gobernador de Puerto Rico aceptó la obra como regalo, destinando fondos públicos al traslado e instalación del monumento. En un principio se pensó en colocarla en San Juan pero la gran altura podía interferir con el tráfico aéreo y su colocación quedó en suspenso hasta una década después. En 2008 la escultura viajó a Mayagüez, donde volvió a encontrarse con los mismos problemas que en San Juan y las ciudades estadounidenses.
Finalmente el monumento se levantó en Arecibo, donde aún permanece pero donde su futuro parece igualmente incierto. La altura y la oposición de los detractores del almirante parecen amenazar de forma crónica su presencia en América.
La escultura es la de mayor tamaño de todo el continente americano con 126 metros de altura. Está formada por un pedestal en forma de gigante columna jónica y un mapa, sobre la que se representa una carabela, una estatua de 25 metros de Cristóbal Colón casi idéntica a la de Sevilla, con la diferencia que en esta, el almirante maneja el timón. Un alto mástil se eleva por encima de la estatua sosteniendo las velas de las naves de la expedición.
El lugar donde se encuentra el monumento está rodeado de una valla que no permite acercarse, contemplándose solo desde la distancia e impidiendo así apreciarla correctamente. En el recinto había planteados otra serie de servicios de hostelería que no han llegado a materializarse y es que parece que su ubicación actual podría no ser la definitiva tres décadas después.
Una pena que no esté en otro lugar de la ciudad, cómo decían hace años que lo iban a trasladar al Prado de San Sebastián, pero pasará cómo siempre, hasta que no lo terminen de expoliar no se enteraran estos políticos